Ahora que andamos con la búsqueda de que el squash ingrese a la justa olímpica, Kahn Avis también se interesa porque nuestro deporte logre su inclusión en los Olímpicos del 2020, ahora nos manda su colaboración, recordando primero (es un viejito decrépito, hay que perdonarlo), con algunos detalles que no sólo buscan entretenernos por un momento sino también hacer un poco de conciencia, en este nuestor golpeador y golpeado deporte. Por cierto, como ya no lo reconocían, volvimos a seleccionar su clásica foto ultrasecreta.
Como pasa cada vez que se celebran los Juegos Olímpicos, necesariamente sale a colación el porque el deporte del Squash no forma parte aún de estos, y los comentarios van y vienen, por cierto, en artículos de Cyber Squash pudimos enterarnos de varias razones y posibilidades para que nuestro deporte sea incluido en el futuro dentro de los deportes olímpicos.
Entre otros de los motivos, destaca el de la publicidad y difusión de este deporte en los diferentes medios de comunicación, es muy fácil darse cuenta que el espacio que ocupa el Squash es mínimo, sobre todo si lo comparamos con el football, que llega a acaparar incluso el 100% de la sección de deportes de ciertos periódicos. Únicamente los diarios dedicados por entero a los deportes publican, de vez en cuando, artículos referentes al Squash.
En general los deportes de raqueta, excepción hecha del tennis, ocupan poco el interés de los medios especializados y podemos explicar la falta de atención a que no son deportes que cubra la TV, y por lo tanto no comercializan ni atraen a los grandes patrocinadores, sin embargo, el número de jugadores de Squash en el mundo supera con creces al de muchos deportes que si se encuentran dentro de las Olimpíadas.
Después del gran auge que tuvo el Squash en nuestro país a finales de los años 60s y durante la década de los 70s, el interés comenzó a decaer, la moda que comenzó con unas pocas canchas en casas particulares, se conservó únicamente en unos cuantos clubes, donde los fanáticos practicábamos los raquetazos como un culto, rayando a veces con lo esotérico – ya que todos sabían que era el Squash, pero pocos lo practicaban realmente- y desde luego su difusión y publicidad eran muy escasas; por cierto, en esta página apareció una excelente traducción de Ernesto Cuevas de un artículo en inglés acerca de los orígenes del Squash en México.
De esos tiempos recordamos, por ejemplo: la pelota, que era dura como piedra, y que muchas veces la sentimos “en carne propia” y que dejaba unos moretones en forma de dona que ardían realmente, aún más que la risilla del contrario que murmuraba un inaudible: “perdón”; recordamos, igualmente, las venerables raquetas de madera (la Bancroft, snif, snif,…) que comparadas con las de hoy, es como comparar el avión de los hermanos Wright con el bombardero Stealth.
En aquéllos antidiluvianos tiempos el encontrar algún artículo sobre el Squash o alguna noticia en la televisión, era algo que se atesoraba, ya que nos demostraba que en alguna otra parte existían jugadores que compartían nuestra afición, pero, aún ahora, no es común encontrar artículos sobre este deporte, especialmente si se trata de medios que no son expresamente dedicados al deporte, por ello me sorprendí cuando en días pasados, al entrar al portal de internet ( Msn1 ) donde se despliegan noticias y artículos diversos, me encontré con uno que rezaba más o menos así: “Squash el mejor deporte para combatir el estrés”.
En dicho artículo se ponderaban las virtudes del Squash para combatir el estrés de la vida moderna, así como otras cualidades, que nosotros conocemos de sobra, y que lo hacen un deporte divertido y completo, ya que la sensación de golpear la pelota ayuda a aliviar las tensiones y muchas veces el mal humor, que se acumulan cada vez más y por las más diversas razones.
Desde luego es grato encontrar menciones a nuestro deporte en cualquier medio, sin embargo al observar la ilustración que acompañaba al artículo de marras nos encontramos que (siempre hay un pero) en la foto aparecían cuatro jugadores de racquet ball, si de racquet ball, incluso la toma se hacía con un primer plano de la raqueta, que como se sabe desde tiempos bíblicos, son diferentes, por ello desde aquí recomendamos al anónimo autor, que al parecer no es practicante del Squash, acuda a esta prestigiosa y leída página y obtenga la asesoría e ilustraciones adecuadas, ya que estoy seguro que los editores tendrán mucho gusto en proporcionarle ambas.
Con el deseo de encontrar cada vez más menciones a nuestro deporte, les deseo que tengan un buen juego, hasta la próxima.