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Cuando nos planteamos la preparación física de un jugador de squash, pensamos rápidamente en la velocidad, ahora si entendemos los fundamentos de esta, seguramente partiremos trabajando la fuerza de base, fuerza máxima y fuerza explosiva  para llegar a la velocidad.

Un buen preparador físico también pensara en la resistencia especifica y probablemente en  el inicio del programa trabaje la potencia aeróbica mediante carrera intermitente donde sume a la fatiga central (cardiovascular) una la fatiga periférica (muscular) por detenciones y cambios de dirección, lo que tiene directa relación  con los deportes aciclicos como el squash, en donde  el jugador corre y se desplaza cambiando continuamente de dirección y de velocidad. Luego pasara a trabajar la  capacidad anaeróbica aláctica y láctica  pensando en los tiempos de juego, duración aproximada de los puntos y las pausas intermedias durante el juego.

En el párrafo anterior hemos hablado de velocidad, fuerza, potencia aeróbica, capacidad anaeróbica, todo sumamente importante pues conforman las llamadas capacidades condicionales, pero muchas veces los preparadores físicos olvidan algo fundamental que son las capacidades Coordinativas o cualidades de tipo informacionales que le permiten al jugador:

•Orientar su posición dentro de la cancha por ejemplo para buscar la T después de cada golpe, capacidad de orientación.

•Reaccionar a situaciones complejas y cambiantes propias de Squash, capacidad de reacción.

•Discriminar cuando necesita mas o menos fuerza y más o menos velocidad, capacidad de diferenciación.

•Hacer movimientos veloces y acoplarlos con una técnica de golpe especifico. Capacidad de combinación.

•Recuperar su estabilidad para ejecutar una técnica especifica, después de un desplazamiento o movimiento rápido, pues la mayor parte de los golpes se ejecutan en un estado de desestabilización, donde  el jugador necesita acomodar su posición constantemente, capacidad de equilibrio.

Como podemos ver la preparación física de un jugador de Squash no solo debe ser correr, levantar pesos, saltar, lanzar o hacer sprint, pues debemos trabajar de forma aislada y combinada  las capacidades Condicionales y Coordinativas en pro de mejorar los movimientos y situaciones que se presentan en el  juego, para esto  recomiendo:

•Que dentro del trabajo con pesas incorpore los movimientos derivados de la halterofilia (envión, arranque),  movimientos que permiten coordinar  a todo el cuerpo en una acción explosiva, 

•Que ejecutes lanzamientos con balones de distintos pesos, acompañado de desplazamientos, pues con esto se logra que el jugador se mueva en la cancha a realizar acciones de distinto nivel de fuerza (para accionar los músculos involucrados en los golpes a distinta intensidad y precisión tal como en el juego),

•Que realices movimientos  que combinen la acción de piernas y brazos de forma rápida y explosiva como por ejemplo el burpy.

•Que simules golpes con poleas o elásticos sentado sobre un balón Suizo, para que ejecuten fuerza explosiva en  situaciones de desestabilizaron.

•Que realices desplazamientos y tareas en la cancha, teniendo que responder a estímulos sorpresivos e inmediatos que indiquen cambios de dirección y tareas especificas del momento. 

Estas son solo algunos ejemplos de cómo incorporamos el trabajo coordinativo a nuestro tradicional trabajo fisco condicional. Bajo estas condiciones no solo conseguiremos un buen estado atlético deportivo, sino que haremos de nuestro jugador un sujeto eficiente para el juego que adapte su capacidad atlética para cumplir con los requerimientos especiales del  Squash.

Prof. Ignacio Parma